El Ramadán manchego

30.08.09 -
JOSECHU GUILLAMÓN ALBACETE

En la provincia viven alrededor de 9.000 musulmanes, 3.000 de ellos en la capital
Durante un mes pasan el día sin comer, sacrificándose ante Dios y acercándose a los pobres
Desde hace una semana y hasta el 21 de septiembre, los musulmanes se encuentran inmersos en la celebración del Ramadán, se trata de un mes de ayuno y oración que se celebra el noveno mes del calendario musulmán, que se rige por la luna y que por tanto varía de fecha cada año, retrasándose diez días, cada 365.
En el mundo occidental el Ramadán es conocido prácticamente sólo por el ayuno, algo fundamental, como explica el Imán del Centro Cultural Islámico de Albacete, Abdellah Elmarini. «El Ramadán es un sacrificio que hace el musulmán para acercarse a Alá. Con el ayuno se pasa hambre y se siente lo que siente el pobre, que pasa hambre toda su vida».
Obligaciones
Pero el Ramadán, es mucho más que dejar de comer durante las horas de luz. «En el Ramadán uno no deja sólo la comida, tiene que dejar también las malas acciones y las malas costumbres. No puede hablar mal de la gente, no puede engañar a nadie, no puede mentir. Son cosas que por desgracia a veces se hacen, pero durante el Ramadán todos tienen que dar ejemplo, de que son buenos musulmanes».
Además un buen musulmán tampoco puede beber, fumar, ni mantener relaciones sexuales durante las horas de sol.
A parte de todos estos preceptos, también deben respetar las oraciones diarias, que se realizan cinco veces al día, en dirección a la Meca (por donde sale el sol). Después de la última oración del día se hacen unas extras.
Durante los 29 ó 30 días que dura el mes, el imán va recitando el Corán, leyéndolo de principio a fin, hasta que el último día de mes, termina de leerlo entero. Esta lectura del libro sagrado, tiene todo el sentido, puesto que el Ramadán es el mes en el que el Corán fue revelado. No todos los musulmanes tienen que cumplir el Ramadán, existen algunas excepciones. Los niños no tienen porque hacerlo, hasta que tienen 15 ó 16 años, las mujeres embarazadas o lactantes, los ancianos, los enfermos y los viajeros (mientras que dure su viaje) tampoco tienen que respetar estos preceptos.
En cualquier caso, a los niños se les va acostumbrando desde una edad más temprana, para que vayan cogiendo el hábito del ayuno, que según explica el imán Abdellah Elmarini, también es muy bueno para la salud.
En Albacete
En la provincia de Albacete existen alrededor de 9.000 musulmanes, de los cuales 3.000 de ellos, residen en la capital. Aunque la mayor parte son marroquíes, también existe un número considerable de musulmanes de Mali, Senegal y Argelia, además de personas de otras nacionalidades menos representativas.
Un gran número de ellos, se da cita de forma habitual en el Centro Cultural Islámico de Albacete y ese número crece durante el mes sagrado.
En el centro, que hace las veces de mezquita, se realizan actividades todo el año, aunque hay algunas especiales, que sólo se realizan en el mes de ramadán.
La más representativa es la llamada operación Ifdar, como explica el presidente del centro, Mostafa Snabi. «Se trata de una actividad extra que realizamos durante estas fechas. Cogemos ayuda de mucha gente de Albacete, sean musulmanes o no y lo que hacemos es que cuando se va el sol y ya podemos comer, lo que hacemos es invitar a la gente pobre, a que venga aquí al centro, para darles una ración de comida, por lo menos para poder aguantar». Una ración que se hace más necesaria en época de crisis. «Ahora estamos viviendo una situación difícil, mucha gente no trabaja, no tienen ni siquiera para comer y entonces aprovechamos, dentro de lo que podemos y actualmente estamos dando de comer diariamente alrededor de 70 personas, de muchas nacionalidades».
A pesar de que en el centro se dan cita personas de diferentes nacionalidades, no existen problemas de convivencia. «La convivencia es muy buena entre todos los que vienen aquí, a pesar de que vengan de diferentes países. Ayer incluso recibimos la visita de unos chicos de Albacete, cristianos, que quisieron conocer el centro. No hay que mirar a la gente por su nacionalidad o por su religión. Da igual que las personas sean de una cultura o de otra, lo que hacemos es sumar».
Otras actividades
Cuando termine el Ramadán y comience el curso escolar, el Centro Islámico centrará sus actividades en la juventud. «Vamos a trabajar mucho con los más pequeños. Vamos a tener tres clases para niños y luego enfocamos también una actividad para la juventud y el deporte, dentro de esas actividades se encuadra, por ejemplo, nuestra participación en el Mundialito».
Otro de los temas que les interesa potenciar es el de la mujer. «Empezamos a trabajar en el tema de la mujer antes de verano y seguiremos después de la Feria, que será cuando reanudaremos las actividades con las mujeres, que se suelen juntar los sábados y los domingos aquí. Tenemos previsto hacer talleres, entre el que se encuentra el de cocina árabe.
Otra de las actividades que quieren realizar próximamente es una jornada de Puertas Abiertas. «Estamos buscando alguien que nos ayude para montar una carpa y abrir nuestra puertas a los vecinos del barrio y a todo el pueblo de Albacete. Tenemos que pedir ayuda al ayuntamiento para la carpa, para servir dulces, para dar a conocer nuestra cultura a la gente de aquí».
Entre las actividades que se tiene pensado realizar próximamente, cabe destacar la fiesta que se hará para celebrar el fin del Ramadán, para la que necesitan un espacio grande, puesto que a la del año pasado, que tuvo lugar en el Pabellón Vereda, acudieron más de mil personas.